Sábado 2 de Agosto de 2025

12/01/2025

“Jurado Nº2″, de Clint Eastwood: culpa, ambición y deber en un drama judicial que es un festival de emociones

Fuente: telam

La nueva película del veterano cineasta estadounidense confirma que, con 94 años, el director de “Río Místico” no perdió ni un centímetro de su capacidad para entretener, ilustrar y maravillar con lo mejor del cine

>Hay historias que no pasan de moda, relatos clásicos que, más allá de las tendencias sociales o artísticas de la época, vuelven una y otra vez a temas capitales de la humanidad como la culpa, la ambición y la responsabilidad. Son precisamente estas cuestiones las que atraviesan Jurado Nº 2, la nueva (¿y última?) película del gran director estadounidense Clint Eastwood, maestro del cine y notable creador de personajes ambiguos y plenos de matices que para cualquier espectador sensible se convierten en un festival de emociones. Una película de ayer, de hoy y de siempre; a lo mejor, esa película que estabas esperando.

Viven en Savannah, Georgia, y cuando faltan apenas semanas para el nacimiento del bebé, Justin es convocado para integrar el jurado que tratará el caso de la muerte de Kendall Carter, una mujer joven que un año antes murió de manera violenta en un incidente turbio, luego de discutir una noche en un bar con su novio, James Sythe (Gabriel Basso).

Él, un tipo agresivo y proclive a la furia, con una historia de violencia; ambos en una relación tóxica. El cadáver de Kendall fue hallado horas después de su muerte por un senderista justo en un tramo de la ruta que está marcado por un cartel que les advierte a los automovilistas que tomen precauciones: por allí pasan ciervos.

La fiscal del caso es Faith Killebrew (Toni Collette, una vez más en una actuación descomunal). La mujer transmite cierta frialdad y tiene ambiciones políticas poderosas: quiere ser fiscal de distrito y sabe que tiene entre manos un caso de altísimo perfil mediático. Conseguir una buena condena para quien -todo indica-, asesinó a su novia seguramente le dará los créditos necesarios para dejarla en la puerta de sus deseos.

Las fabulosas ambiciones de Faith colisionan con su deber: le cuesta distinguir entre los hechos y los deseos y por eso desestima la “duda razonable” y solo escucha las versiones que dan por cierto que solo hay un posible asesino.Justin llega sin ningún entusiasmo a la primera reunión con el resto de los jurados, solo le importa terminar pronto para volver a casa a compartir los momentos amorosos que se avecinan. Recién en los tribunales se enterará de cuál es el caso que deben resolver. Recién allí sabrá, también, que, pese a que no estaba al tanto de los acontecimientos, la historia no le era del todo ajena.

Es entonces cuando empieza para él una lucha sin cuartel entre la necesidad de cumplir con su deber y que todo pase pronto para poder seguir con su vida amable y los dilemas morales que comienzan a acosarlo y no le permiten estar en paz con su conciencia. Toda la película será el retrato de esa pelea desigual entre los hechos y su alma necesitada de limpiar culpas. La mirada de Hoult transmite toda la angustia y la desesperación que lo abruma. Algunos críticos aseguran que su actuación destaca como para recibir una nominación para los Oscars.

Con el correr de la historia, narrada a través de un guion que pone en escena lo necesario y elimina lo superfluo, los hechos se imponen y llegará también para Faith la hora de darse de trompa con un laberinto sin salida a la vista. Un momento crucial en el que solo restan dos opciones: ignorar las evidencias que se acumulan o asumirlas a costa de perder todo lo conseguido pero, a cambio, poder estar en paz con su conciencia y su principal mandato: hacer cumplir la ley.

Jurado nº 2 (Juror#2) es la película número 40 dirigida por Clint Eastwood, quien a los 94 años no parece haber perdido ni un centímetro de su capacidad para entretener, ilustrar y maravillar con lo mejor del cine. El film tiene una historia central y dos personajes principales que se debaten entre el deber moral y la felicidad y hay también varios personajes menores que representan tipologías diversas y ricas, algo que recuerda por supuesto al clásico Doce hombres en pugna, de Sidney Lumet (1957).

Resulta muy atractiva esta parte de la historia de Jurado Nº2 porque necesariamente lleva a pensar en este presente binario en el que las personas solo buscan ver satisfecha su concepción acerca de las cosas. No vivimos un tiempo caracterizado por el debate plural sino por el hostigamiento; no es un tiempo de discusión con argumentos sino de búsqueda de estrategias para imponer opiniones. Lejos de todo dogmatismo, Eastwood, conocido por su apoyo a las ideas republicanas en un ambiente mayormente demócrata como es el mundo del espectáculo en Estados Unidos, consigue una vez más demostrar que las cosas no son blancas o negras, que hay matices, y que, a veces, pueden incluso ser blancas y negras a la vez.

Hay otros dos personajes exquisitos. Uno de ellos es Harold (J. K. Simmons), un ex detective sensato, alejado de todo fanatismo, a quien la experiencia le indica que Sythe no parece haber sido el asesino de su novia. Su función en el jurado es poner en contradicción los prejuicios de los otros miembros.

Hay algo que cerca del final le dice Justin a la fiscal Killebrer y que de alguna manera resume el espíritu filosófico de la película. Ambos ya están lidiando con sus contradicciones éticas. Sentados en un banco al aire libre, hablan con ambigüedad acerca del fallo, ninguno quiere dar un paso en falso y necesitan desesperadamente salir del laberinto por arriba. La mujer no consigue sentirse bien consigo misma, el éxito no compensa la culpa. Él, en cambio, piensa que ya sufrió mucho en la vida y que nada debería impedirle encontrar el modo de ser feliz.

“A veces la verdad no es la justicia”, dice Justin. Y la frase resuena como látigo.

A los maestros no se les falta el respeto

Debido a los magros resultados de sus últimas películas, los responsables de comercializar el film apostaron por estrenarla directamente en una plataforma pero, por insistencia del director, se logró La película resultó mucho más atractiva de lo que suponían los que tomaron la decisión de no jugarse por ella ya que no solo recibió buenas críticas sino que está teniendo una demanda interesante por parte de los espectadores. La Warner recibió duras críticas por no haber apostado por No podría elegir una película favorita de este director. Suele convocarme siempre, pero si tuviera que nombrar cinco, seguramente Gran Torino con ese protagonista cascarrabias lleno de prejuicios, malos sentimientos pero también pleno de humanidad. Desde ya, no podría obviar Entre las cosas lindas que tiene este oficio, están los encuentros mágicos con los artistas que se dan de vez en cuando. Hace un tiempo conté en el newsletter “Siempre recuerdo una entrevista colectiva en la que participé en la NASA, en Houston, y en donde entrevistamos al director y los actores de la película Space Cowboys: Clint Eastwood, Donald Sutherland, Tommy Lee Jones y James Garner. Ya sé, me envidiás fuerte.

O tal vez no fue así. Y en realidad pude ver en detalle esa suela simplemente porque en esa sala de la NASA yo estaba muy cerca del hombre, que cruzó una pierna sobre la otra, apoyando el tobillo sobre la rodilla.

Un reencuentro, dos recomendaciones

“A Clint no le gusta dar demasiadas explicaciones. Una de las cosas que lo hace magistral como director es que le da espacio al público para pensar y trabajar un poco por sí mismo. No se los da con cuchara en la boca” dijo Nicholas Hoult en una entrevista a propósito de este final, una escena abierta que es una joya en sí misma y que curiosamente fue la primera escena que filmaron juntos Toni Collette y Hoult, aunque ya se conocían bien.

En la película, Toni Colette hace de Fionna, una mujer depresiva, y Marcus es su hijo, un chico acostumbrado a la hostilidad del mundo y al bullying, alguien obligado a hacerse cargo de las cosas antes de tiempo y que desesperadamente busca que su madre encuentre una razón para vivir.

¿Te das cuenta? Empecé hablando de una película y terminé hablando de dos. Pero hoy es domingo y posiblemente tengas algo de tiempo, así que prepará todo para una doble función.

Fuente: telam

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