Viernes 18 de Octubre de 2024

27/07/2024

Del medallero a los escenarios: las celebridades que intentaron competir en los Juegos Olímpicos

Fuente: telam

Estos aspirantes transformaron sus fracasos y logros deportivos en fortalezas que los llevaron a brillar en el entretenimiento

>La gloria máxima en el deporte está representada por los Aunque ahora son más conocidos por sus logros en la actuación o la música, sus historias revelan la intensa dedicación que se necesita para sobresalir no solo en el espectáculo, sino también en el ámbito deportivo, cada uno con su propia trayectoria, desafíos y giros inesperados.

Antes de que Según relatan los medios, el protagonista de Megalodón mostró desde joven un interés particular por los deportes. Practicaba artes marciales y también era aficionado al fútbol.

La vida del joven Jason cambió durante unas vacaciones en Florida cuando tenía entre 11 y 12 años. Mientras disfrutaba del verano, quedó fascinado con los clavados cuando vio que un hombre se arrojaba dando volteretas desde un trampolín. Tanta fue su admiración por esta habilidad que se matriculó a un club de natación tan pronto regresó a Inglaterra.

La ambición de Statham por llegar a los Juegos lo llevó a intentar la clasificación en dos ocasiones —para Seúl 1988 y Barcelona 1992—, pero no tuvo éxito en las competencias preliminares.

Años más tarde, ya acostumbrado a las luces de Hollywood, Jason reconoció la frustración de no haber alcanzado ese objetivo. “Todavía es un punto amargo para mí no haber llegado a los Juegos Olímpicos”, confesó en una entrevista con The Standard en 2016. “Yo comencé muy tarde. Probablemente no era lo mío. Quizá debí probar con otro deporte”, expresó.

“Creo que lo que no logré [en los deportes] me ayudó a concentrarme mejor y a tomar mi carrera actoral más en serio,” dijo Statham mientras reflexionaba sobre su pasado en una entrevista con la BBC en 2008.

Geena Davis, la actriz recordada entre muchos papeles por ser la Sra. Eleonor Little en Stuart Little, también estuvo bastante cerca de convertirse en atleta olímpica cuando descubrió su talento con el arco y la flecha. Todo empezó por simple curiosidad de ver si podía ser realmente sobresaliente en algún deporte real. Debido a su trabajo ante cámaras, ya había probado una gama de disciplinas como baseball, taekwondo, ski sobre hielo y equitación. Sin embargo, solo conocía “la versión para películas”.

El tiro con arco ya no tenía categoría de simple hobbie para ella, pues le dedicaba cinco horas al día, seis días a la semana. Y el esfuerzo constante la llevó a ganar varias competencias locales, nacionales e internacionales.

Con dos años de entrenamiento, la actriz de Thelma y Louise se midió con otras 300 arqueras que aspiraban a un cupo en el equipo estadounidense para los Juegos Olímpicos de Sidney 2000. Geena Davis quedó en el puesto 24, que no fue suficiente para alcanzar la clasificación.

“Lo llevo todo demasiado lejos. Estaba en las preliminares para los JJ.OO en mis cuarentas, y por algo que decidí probar. Fue fabuloso. Nunca lo olvidaré”, expresó en un evento de prensa en 2016.

En 2019, el cantante australiano Cody Simpson decidió ponerle una pausa a su carrera musical para perseguir un sueño de su niñez: la natación competitiva.

El talento en la piscina lo había cultivado desde la infancia y ostentaba dos medallas de oro en Campeonatos de Natación de Queensland. Sin embargo, ahora el reto era superior pues implicaba reconectar con la exigencia natural del deporte.

Para ello buscó la guía del dos veces olímpico Brett Hawke y el apoyo de íconos como Michael Phelps e Ian Thorpe. En las Pruebas de Natación de Australia para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Cody registró un récord personal de 50.22 segundos en los 100 metros estilo libre, aunque no llegó a la final. Y siguió mejorando.

En 2023, el Simpson también se preparó para las Pruebas de Natación de Australia 2024 con la esperanza de clasificar para los Juegos Olímpicos de París. Aunque no consiguió un lugar, su rendimiento casi lo llevó a cumplir el objetivo. Finalizó quinto en los 100 metros mariposa con un tiempo de 51.79 segundos, quedándose sólo a poco más de medio segundo del tiempo necesario para la clasificación.

Empezar de cero y tratar de ver hasta dónde podía llegar en la mitad o un tercio del tiempo del que todos los demás han estado entrenando. Y sólo para hacer lo correcto por ese niño en mí que dejó [la natación] ir y perseguir otra cosa. Ha sido un viaje increíble”, añadió.

Cuando tenía 17 años, el talentoso esgrimista Jackson Wang se enfrentó a un complicado dilema: continuar la ruta trazada hacia los Juegos Olímpicos de Londres o responder al casting de una compañía coreana que le veía potencial para convertirse en una estrella de k-pop.

Desde casa, la vida de Jackson siempre estuvo influenciada por el deporte. Su padre, Wang Ruiji, también fue esgrimista. Ganó una medalla de oro en los Juegos Asiáticos de 1978 y compitió en las Olimpiadas de 1984 y 1988. Por su parte, su madre, Sofia Chow, fue una gimnasta destacada de la selección nacional china en los años 80.

Bajo la guía de su padre, el talentoso hongkonés comenzó a entrenar en esgrima a los diez años y rápidamente demostró habilidad propia. En su mejor momento, el adolescente Wang Jiaer (su nombre real) llegó a ser el número 1 en sable juvenil para Asia y número 11 en el ranking mundial, según una entrevista de la época del South China Morning Post.

A esas alturas, por su edad, el siguiente objetivo eran los Juegos Olímpicos de verano. También había sido admitido en la Universidad de Stanford y tenía una beca ganada por sus credenciales deportivas. Sin embargo, el destino tenía otros planes.

En 2010, mientras jugaba baloncesto con sus amigos, Jackson fue descubierto por un cazatalentos de JYP, una famosa agencia de entretenimiento surcoreana. Luego de mucha insistencia, él aceptó presentarse a una audición. Contra todo pronóstico, superó a más de 2,000 aspirantes y fue aceptado como aprendiz en JYP.

Aunque ellos intentaron disuadirlo, Jackson meditó mucho en el riesgo que implicaba abandonarlo todo por ir a Corea del Sur. “Me pregunté si quería practicar esgrima toda mi vida ¿Por qué no probar algo nuevo? No quería llegar a los 80 y lamentarme de no haberlo intentado. Así que me fui”, explicó en un programa chino.

Luego de dos años y medio de preparación musical, Jackson Wang debutó en 2014 como miembro de la boyband GOT7. Desde entonces, ha conseguido fama mundial tanto en el grupo como en su prolífica carrera como solista.

Fuente: telam

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