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09/02/2025
Fuente: telam
Tal como ocurre en la Patagonia, la provincia litoraleña sufre el asedio de focos ígneos que se multiplicaron esta semana. La directora de una escuela rural murió, 30 personas fueron evacuadas y al menos 50 personas debieron ser asistidas
>En paralelo a lo que sucede Las llamas avanzaron con rapidez debido a los vientos y la alta temperatura, típica de los veranos en la región. Pero el material combustible tomó fuerza ante la sequía durante febrero, alcanzando las localidades de Curuzú Cuatiá, Mercedes, Perugorría y Villa Olivari, entre otras.
“No tengo el número preciso, pero calculo que estamos próximos a las 100 mil hectáreas quemadas desde el 1 de enero en toda la provincia”, contó a Infobae el coordinador del Comando Operativo de Emergencias de Corrientes, Bruno Lovinson.Brigadistas, bomberos y agentes de Defensa Civil trabajaban en la tarde del sábado en focos que permanecían activos en Colonia Liebig; en Ita Pucú, en la zona de Mercedes; en Ayuí Grande; en Perugorría, y en María Chica, del departamento de Curuzú Cuatiá.
Daniel Panario, presidente de la Sociedad Rural (SRA) de Curuzú Cuatiá, calificó la situación como “desesperante”. En declaraciones a Canal 5TV, estimó que en la zona ya se han quemado aproximadamente 25.000 hectáreas en lo que va de febrero. “Nosotros veníamos advirtiendo, el INTA y los servicios meteorológicos también alertaron que esto podía suceder”, lamentó.
“Esto es un infierno”, expresó Carina Tomasella, presidenta de la Asociación Rural de Perugorría, en diálogo con radio Sudamericana. Hay una sequía abrumadora. Llevamos tres meses sin precipitaciones importantes”, informó la dirigente rural.Más allá de las estimaciones, lo cierto es que el fuego abrasador impactó en varios puntos del territorio provincial, lo que generó preocupación a los pobladores.
Con la asistencia nacional de dos aviones hidrantes, un helicóptero y dos brigadas del noreste del Sistema Nacional del Manejo del Fuego, los equipos provinciales de brigadistas venían interviniendo durante la semana en zonas como La Cruz, Estación Solari y Mantilla.En el área de los Tres Cerros, se registró el jueves un incendio forestal en una plantación de pinos en Loma Alta. Mientras que en la zona de Aquidabán, más de 20.000 hectáreas ya fueron afectadas por los incendios, según el reporte oficial.Este jueves, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, sobrevoló las zonas afectadas y supervisó el operativo de combate en Curuzú Cuatiá, Gobernador Martínez y a lo largo de la costa del río Uruguay. Estuvo acompañado por el intendente de Curuzú, José Miguel Irigoyen. Los funcionarios escucharon testimonios de propietarios de campos, vecinos de parajes y los miembros de bomberos voluntarios y agentes de la Brigada de Incendios Forestales de la Policía de Corrientes (BRIF).
En medio de la crisis, la provincia correntina lamentó la muerte de Cindia Alejandra Mendoza, de 30 años, directora de una escuela rural en Mariano I. Loza. Según relató la intendenta de la comuna, Zulema Fernández, Mendoza advirtió sobre el avance del fuego y pidió ayuda a los bomberos. Sin embargo, en su desesperación por contener las llamas, fue alcanzada por un remolino de fuego, que le causó quemaduras en el 80% del cuerpo.La docente fue trasladada al Hospital Las Mercedes, donde sufrió cinco paros cardíacos antes de fallecer.Los incendios también provocaron otros problemas de salud en la población, especialmente en las comunidades más afectadas. Más de 50 personas recibieron asistencia médica por quemaduras, picaduras de insectos, irritación ocular, cefaleas y dificultades respiratorias, según informó la Subsecretaría de Atención Primaria de la Salud (APS).En medio de este entorno infernal, las autoridades reiteraron la prohibición de realizar quemas en toda la provincia y solicitaron a la población que denuncie cualquier foco de incendio al 911 o al 101.
Fuente: telam